sábado, 11 de abril de 2020

UNA OPORTUNIDAD MÁS


Dejo caer, el microrelato del Evento de Abril, cuya organizadora es @Musajue, del #OrigiReto2020 espero que cumpla y os guste, así que a disfrutar.
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  Después de tanta terapia y meses para aprender a orientarme, salgo de paseo con Lis. Es una muchacha estupenda y creo que preciosa. Me guío más por su alma y forma de ser, ya que no puedo verla.
  Una larga caminata hace que paremos un momento para descansar. Le pregunto a Lis donde estamos, me dice que escuche, que sienta y luego le diga yo mismo qué lugar es. Cierro los ojos y agudizo mis oídos.
— Escucho un río cerca, el gru-gru de palomas, huele a hierba, el aire es fresco y puede ser ¿en una colina?
— Lo has hecho genial, estamos en el Río Umia, sobre el puente. Las palomas están bebiendo en la orilla del río, es un paisaje precioso.
  Me encontraba feliz de poder ir progresando, pero a la vez triste por perderme esa maravilla. Intento coger del brazo a Lis, pero no la encuentro. La llamo y no contesta, así que me pongo nerviosa.

  Grito, con todas mis fuerzas, no hay respuesta. No entiendo cómo me puede dejar aquí sola. Lloro desesperadamente, así que me siento, porque no se para donde ir. Hasta que me encuentra un vigilante, era tarde y estaba temblando de frío. 
— Señorita, ya es hora de que se marche, no puede quedarse aquí. Los paseos son solo hasta las 6 en invierno.
No puedo irme, no se por donde salir y mi amiga Lis a desaparecido.
— Lo siento, no sabía que usted es…
— Ciega, sí, mi amiga me trajo para tomar el aire y que practique. Pero no se que ha pasado, así que necesito ayuda.
  Me sujeta del brazo y me lleva hasta el puesto de socorro. Allí se encargaron de llamar a la policía. Cuando llegaron, me hicieron un montón de preguntas. Si había escuchado algo, si ella podría haberse escapado, si huía de alguien, que clase de persona era, en fin. Preguntas sin sentido para mí.
  Pedí que llamaran a mi familia para que fueran a buscarme, estaba cansada de tantas preguntas. Necesitaba una cama, algo caliente y dejar de pensar por un momento. Después de aquel accidente, me fué dificil volver a comenzar y esto no me podía estar pasando ahora.
  A la semana la policía contactó con nosotros. Encontraron a Lis, tirada en un barranco, casi sin vida. Pero lo bueno de todo es que también cojieron al responsable. Era el padre de Kaly, mi novia, iba conmigo en el coche cuando nos estrellamos y ella murió.

  Confundió a Lis conmigo, quería que pagara por su muerte. Fuí yo la que conducía esa noche y cambiaría mi vida por la de ella, pero no puedo y este es mi castigo de por vida.
Condiciones de @RJRandom:
1.- Un río por escenario
2.- Deben aparecer palomas.
3.- Una desaparición tendrá relevancia en la historia.
Mis condiciones:
1.- Un ciego/a protagonista.
2.- Un puente.

Contiene 449 palabras.
Río Umia (Galicia)

3 comentarios:

  1. Uau, no esperaba ese final para nada.
    El principio pintaba todo tan bonito y el final es tan retorcido.
    Te ha quedado un microrrelato muy interesante, enhorabuena ^^

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    1. Muchas gracias, me alegro que te guste. Últimamente los relatos me salen así, con un giro inesperado y algo tétrico jejeje.

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  2. Hola! Me ha conmovido la historia de la joven ciega y su amiga Lis, que de cierta forma se convierte en un lazarillo. Lamento la actitud vengativa del padre de Kaly. Hay gente equivocada. Buen microrrelato. Nos leemos.

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