Reseñas-Auto evaluación

Microrelatos

martes, 2 de abril de 2019

DESPEDIDA



  Y llegó el relato de Abril, muy temprano esta vez. Espero con ansias vuestros comentarios.

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  Como cada mañana me dispongo a salir a trabajar, dando un repaso mental a todo lo que tengo que hacer el día de hoy. Cuando llego hasta el paso de cebra, veo a mi madre de pie al otro lado de la calle, mirándome fijamente y con una sonrisa. El corazón se me acelera y comienzo a temblar, no sé si de alegría o miedo. Me dirijo hacia ella, como si de un imán se tratara, sin dejar de verla ni un solo momento, extrañándome de que sea real, porque muy en el fondo sabía que no podía ser cierto.
  
  Mientras me acercaba veo que hay muchas diferencias, el color de su pelo no es el mismo, sus ojos son más grandes y no lleva sus gafas, sus cejas están perfectamente delineadas, con un color ligero y sus labios son más gruesos. Detengo mi camino en seco, cuando siento un gran golpe y escucho de lejos a la gente gritar.
  
  Poco a poco voy despertando, pero me encuentro algo mareada y me duele la cabeza. Como si fuera un eco escucho a mi padre, preguntándome si estoy bien y que ya habían llamado al médico para que me examinara. Cuando ya despierto del todo y lo veo sentado a mi lado, pego un brinco, asustada, desorientada y efectivamente estoy en mi habitación. Después de tantos años nada ha cambiado, todo está en su sitio, es como si estuviera en el pasado.
  
  Mi padre me mira incrédulo, sin saber lo que estoy haciendo y me vuelve a preguntar si me encuentro bien. Yo solo asiento con la cabeza, porque no sé qué decir. Me acerco al espejo de mi coqueta, encuentro aquella foto vieja que mis hermanos y yo nos tomamos en el fotomatón y lentamente desvío la mirada hacia mi reflejo.
  
  Tengo el pelo corto, no hay arrugas en mi rostro y veo a mi padre observarme con extraña preocupación. Doy la vuelta lentamente, me acerco a él mirándolo como si fuera un extraño para mí. Toco su rostro, su bigote, que sigue en el mismo sitio, como si se fuera a perder de repente, le abrazo con todas mis fuerzas y comienzo a llorar, por esos 17 años que no le he visto. El hace lo mismo, sintiendo que en un momento dado, algo se nos quedó en el camino y no sabía que era.
  
  Pasó un largo rato hasta que sentí abrirse la puerta, entró un hombre que me era conocido, pero no recordaba de dónde y tras él estaba mi madre. Mis músculos se tensaron, el corazón casi se me sale del pecho, me quedé completamente paralizada. No podía ser cierto lo que estaba viendo, sentí que el estómago se me encogía, por mi cabeza pasaban mil pensamientos. Hasta que vi entrar a mis hermanos, estaban igual que el día que me marché. No podía creerlo, no habían crecido nada, es como si el tiempo hubiera dado marcha atrás. Intentaba tranquilizarme, hablaba para mí misma, eran palabras sin sentido para los demás, hasta que perdí el conocimiento.

  Me supuse que me había desmayado, seguramente me inyectaron algún tranquilizante, porque me sentía débil y mi visión era borrosa. Aunque escuchaba como si estuviera en un túnel, pude captar lo que decían.
   
_ (médico) ¿Alguna vez ha tenido ese comportamiento?
_ (madre) No Fausto, jamás se ha comportado así, es como si fuera otra persona.
_ (médico) Fernando, ¿qué paso cuando se despertó?
_ (padre) Al verme pegó un salto de la cama y comenzó a ver todo con extrañeza. De repente me abrazó fuertemente y empezó a llorar. Pero no dijo absolutamente nada.
_ (madre) Seguramente es por la caída, ha sufrido un gran golpe en la cabeza.
_ (médico) Posiblemente, ha sido un golpe muy fuerte, con pérdida de conciencia. Así que vamos a tener que observarla muy de cerca. Mañana les espero en el hospital para hacer pruebas y descartar cualquier problema.
_ (madre) Gracias Fausto, mañana estaremos allí. Ahora la dejaremos descansar.

  Puedo decir que dormí plácidamente, no tuve sueño alguno y eso es raro, siempre suelo soñar, así que lo achaco al estrés, al golpe, al miedo o a las mismas circunstancias. Cuando me levante, intenté tomármelo con calma, para que no crean que me he vuelto loca. Pero lo único que pasa por mi cabeza es que si estos 17 años que he vivido, han sido solo un sueño y siento temor, tristeza, un dolor profundo en mi alma. No me puedo creer que la familia que había formado haya desaparecido de repente. El dolor de no tener a mis hijos cerca, a mi esposo, me pesa en el corazón.

  Salgo de la habitación lentamente, me dirijo al servicio para asearme un poco y bajo a la cocina, que es de donde se escucha el barullo que hay. Cuando entro todos se quedan en silencio, observándome como si fuera un bicho raro y yo observo de la misma manera, sobre todo a mi hermano más pequeño, llevaba un disfraz de jirafa, para la obra de teatro que se estrenaba esta tarde.  

  Mi papá me invita a sentarme para empezar a desayunar, mis hermanos se me acercan, me dan un fuerte abrazo y un beso. Mi madre me toma de la mano y me intenta relajar, vuelvo a llorar y la abrazo fuertemente, le digo al oído que la echaba mucho de menos y me contesta que ella también. La miro incrédula, es como si ella supiera lo que estaba pasando. Disfruto de ese momento, extrañaba tanto a mi familia, la charla con mi papá, los gritos de mis hermanos, mi casa. Todo me resultó nostálgico.

  Al dirigirnos al hospital, mi madre le dice a mi padre, que nos vamos a ir las dos solas este fin de semana a una casa rural, que necesitamos tiempo para las dos y que tenemos mucho que hablar. El asiente con la cabeza tranquilamente y nos invita a solventar nuestras diferencias con calma, para que todo sea más llevadero.

  Y es verdad, nuestra relación nunca fue buena, había muchas cosas que nos separaban. Pero no me extrañó el que quisiera que pasemos un fin de semana juntas. Todo el mundo decía que no nos parecíamos en nada, solo en el físico.

  Al fin llegó el dichoso viaje, yo tenía muchas ganas la verdad, era mi oportunidad de hacerle todas las preguntas que no le pude hacer años atrás. Yo ya no era la misma y ella lo sabía, se dio cuanta en cuanto me miró. Ya no le tenía miedo. Lo perdí hace 17 años que aún me pesan como una realidad y que cada momento pienso de que ha sido un sueño.

  Fuimos a Papallacta, un pueblo de la provincia de Napo (Ecuador). Hace unos meses construyeron unas cabañas y podías pasar el fin de semana. Sus piscinas son termales, se encuentran en medio de las montañas y hace un frío atroz. Pero es hermoso y tranquilo. Ideal para relajar tensiones y que nadie escuche nuestros gritos, en caso de que suceda.

  Después de dejar las maletas en la cabaña, nos dirigimos al restaurante para desayunar, por un momento permanecimos en silencio y yo estaba angustiada, necesitaba un cigarro desesperadamente o salir corriendo. Una vez que terminamos mi madre sacó de su bolso un paquete de cigarrillos, cosa que me sorprendió, porque ella no fumaba.

_ Lo compré para ti, lo necesitarás. Tenemos mucho de qué hablar y hay poco tiempo.
_ No entiendo nada mamá, sabes muy bien que esto no es real o yo me estoy volviendo loca.
_ Es muy real, tú lo has provocado, insistiendo en saber cosas e intentando entender mi comportamiento contigo. No te bastaba con saber que te quería.
_ Sé que me querías y eso lo entendí en los dos años y medio que duró tu enfermedad, pero  tenía que saber, porque fuiste así conmigo y más aún cuando me enteré que te fuiste decepcionada de mí.
_ No estoy decepcionada, ya no. Lo pude entender ahora que ya no os tengo a mi lado, en estos cuatro años me di cuenta que mi obsesión contigo era para que fueras mejor que yo. Pero cada uno es diferente y yo no podía hacer nada al respecto.
_ ¿Sabes qué fue lo que más me marco de tu muerte? La última semana. No querías hablar conmigo, estabas enfadada, no me mirabas siquiera y yo no encontraba el motivo.
_ Ahora te contaré todo lo que sentí, lo que escuché, lo que viví y lo que quería para ti. No sé si me podrás perdonar o simplemente me puedas entender.

  Salimos a la terraza, pedimos dos cafés y empezó a desmadejar sus sentimientos, desde lo más profundo. Empezando desde su infancia, hasta el día que murió. Yo fui comprendiendo su dolor, podía sentir su sufrimiento y mi alma no necesitaba más respuestas. Todas esas aflicciones se fueron disipando.

  Pude liberar mi dolor, comprendí que no tenía derecho alguno a reprocharle todo lo que había hecho, cuando yo también soy madre y cometeré errores a lo largo de la vida.

_ Sabes mami, jamás pensé que fueras una mala madre, lo único que quería era tu comprensión y que me dejaras tomar mis propias decisiones, aunque me equivoque.
_ Lo sé, pero mi orgullo podía más conmigo y por algún motivo necesitaba que fueras perfecta.

  Cuando nos dimos cuenta,  ya había caído la noche, teníamos frío y estábamos algo cansadas. Entramos nuevamente al restaurante para cenar algo y poder ir a descansar. Cuando nos acostamos, me abracé fuertemente a ella, echaba de menos esos días que podíamos hablar tranquilamente, extrañaba sus risas y los momentos que hacía el tonto con los niños. Puedo sentir en su pecho la tranquilidad de su respiración y después de darme un beso en la frente, me dijo:

_ Estoy muy orgullosa de ti, has luchado con uñas y dientes, no te has dejado abatir, has sentido la soledad más profunda y les has brindado a tus hijos todo el amor que tienes. Para mi es suficiente. Eres feliz y estas en muy buena compañía. Te quiero hija. Dale un beso a mis chicurretos.

  Me quedé dormida en sus brazos y cuando desperté, estaba mi esposo recostado a mi lado, sujetando mi mano y mis hijos a los pies de la cama, todos dormidos. Miré a mi alrededor, me encontré con cables por todo sitio, mi brazo estaba escayolado y me dolía un poco la cabeza. Me moví lentamente, porque tenía la pierna dormida, mi hijo estaba pesándome un poco ya. Se despertaron y encontré en sus ojos un brillo de felicidad, al ver que yo estaba bien. 

  En realidad no sé cuántos días pasé inconsciente. Pero sé que mi alma se encontraba en paz, ya estaba de vuelta y por fin pude despedirme como tanto quería.


Objetivo: 11 (Narra la aventura de alguien que viaja en el tiempo).
Objetos: 2 (Disfraz de jirafa).
                23 (Foto vieja o polaroid).
Palabras: 1794
Contado en primera persona y en presente.
Cumple con el test de Bechdel.
Verborrea interminable.

Aquí os dejo los blogs y los twiter de nuestras organizadoras: @MUSAJUE ( plumakatty.blogspot.com.es ) y @Stiby2 ( nosoyadictaaloslibros.blogspot.com.es ), donde encontraréis las bases del #OrigiReto2019.


16 comentarios:

  1. La historia en sí es muy bonita, la forma en que has presentado el viaje en el tiempo ha sido creativa, me ha gustado. Los fallos que pude encontrarle fueron más que todo en los diálogos, por la falta del uso de la raya y los parentesis para indicar quien hablaba. Pero de resto me ha gustado, ¡mucha suerte!

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    1. Muchas gracias, no se cual es la raya de los diálogos, he probado con todos los relatos diferentes y todo el mundo me dice lo mismo. Ya no se como hacerlo.

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    2. Buenas tardes

      Abre el Word. Pulsa AltGr y el menos del teclado numérico. Copia el carácter que sale y pégalo en la caja de texto. Lo hago: — Esta es la raya buena para los diálogos.

      Un saludo.

      Juan.

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  2. Hola Chery. Pues en sí la historia a través del tiempo del personaje principal de tu relato me pareció muy interesante de leer. Esos sentimientos de nostalgia al encontrarse de nuevo con la madre y esa enseñanza que transmite cuando ya se vale por sí misma le dan un buen toque para que el final sea más feliz. ¡Felicidades, es un relato bastante original!

    PD: En mi caso yo tampoco sé cómo poner el guión largo a través del teclado. Lo único que yo hago es copiarlo y pegarlo en el editor (—)

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    1. Muchas gracias, me alegro que te haya gustado. Haré lo mismo, hasta que logre saber como se hace.

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  3. Que relato tan retrospectivo, se siente muy personal y emotivo. El viaje, esa oportunidad de volver a hablar, verlo todo con la visión de hoy día, con una forma de ser madura, separarte de tu yo actual y volver al pasado... ¿Quien no pensó eso alguna vez? Facil de leer y muy muy personal. Lastima del accidente pero fantastica reconciliación con el pasado y muy tierno despertar con esa imagen del abrazo familiar.

    Por cierto, la raya(—) hay que pegarla a parte o ponerla como un comando extra, no está en el teclado español. Recomiendo siempre tenerlo en un archivo de texto en en escritorio igual que las comillas de cita ^^, espero que te sirva y gracias por el relato :P

    .KATTY.

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    1. Muchas gracias, me alegro mucho que te haya gustado. Tomo nota lo de la raya para el diálogo.

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  4. Buenos días. Un relato muy emotivo que me hizo recordar a mi mamá, ya quisiera hacer un viaje al pasado para decirle lo que siento que faltó decir, valga la redundancia. Bien narrado. Felicitaciones.

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    1. Muchas gracias, me alegro que te gustara. Creo que puedes hacerlo, escribirlo, léeselo y te aseguro que te sentirás mejor

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  5. Hola!

    Me gusta mucho la historia, sobre todo porque desprende una increíble ternura. Toda la escena de las cuentas pendientes, de lo que se quedó por decir tiene ese tono de tristeza entremezclado con el alivio de poder hacerlo. Muy bonito.

    Ah, me despistó un poquito el cambio de tiempo de presenta a pasado, no sé si soy solo yo =D

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    1. Muchas gracias, estoy emocionada porque os a gustado. Aún tengo esos fallitos, pero con el tiempo espero pulirlos.

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  6. Buenas tardes

    Pues ya que estaba, he leído este también. Me llamó la atención el título y la foto.

    Muy buen relato. Muy bien hilada la manera en que la protagonista consigue viajar al pasado. En general, un relato muy emotivo.

    Un saludo.

    Juan.

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    1. Muchas gracias, uno se siente feliz cuando sus relatos son leídos y más aún si gustan. Aunque yo prefiero que lean y puedan hacerme una crítica constructiva, para ir mejorando. Me alegro mucho que te haya gustado.

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  7. Muy buenas!
    Un relato muy tierno y me ha gustado que al final sea esperanzador en cuanto a la redención que encuentra la protagonista al reconciliarse con su madre, a pesar de que todo pueda considerarse un sueño o algo que ocurre sólo en su cabeza, como dijo Dumbledore, por qué no iba a ser por ello algo real xD

    Ya te comentaron algunas cosas por ahí así que sólo diré que alguna frase cambia presente y futuro en los verbos por ejemplo esta es la que más me chocó: "Puedo sentir en su pecho la tranquilidad de su respiración y después de darme un beso en la frente, me dijo:" (puedo vs me dijo)

    Un abrazo!

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  8. Hermoso mensaje de amor filial y más allá de eso, el hecho de perdonar, eso es importante en la vida para lograr recuperar nuestra paz interior.

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    1. Muchas gracias, después de 4 años y medio, puedo decir que lo logré.

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